Lombó asegura que el Centro de Interpretación de los Puentes impulsará la vida cultural y turística de Liérganes
La consejera ha inaugurado este espacio en el que el Gobierno regional ha invertido 45.000 euros y que también incluye la Oficina Municipal de Turismo
La consejera de Educación, Formación Profesional y Turismo, Marina Lombó, ha inaugurado hoy el Centro de Interpretación de los Puentes y Oficina Municipal de Turismo de Liérganes. Lombó ha calificado la instalación, que ha supuesto una inversión de 45.010 euros, como un “ambicioso proyecto” que sirve para impulsar la vida cultural y el sector turístico de la localidad.
“Uno de los principales referentes de Liérganes es su conocido ‘Hombre Pez’, Francisco de la Vega Casar, y el otro es su Puente Mayor, que desde hoy cuenta con su propio Centro de Interpretación”, ha manifestado la consejera.
En su opinión, la obra inaugurada “enriquece” la oferta cultural de Cantabria, ya que se muestran los puentes más importantes de la región, y pone en valor la riqueza particular de esta localidad. De esta manera, ha considerado que “toda Cantabria” se beneficiará con este proyecto.
La iniciativa incluye paneles expositivos de un total de 12 puentes característicos de Cantabria y se ubica en el antiguo matadero y actual Casa de Juventud del municipio. Asimismo, se han aprovechado las obras de reforma para reubicar en dicho espacio la Oficina de Turismo.
La propuesta busca ampliar la ya existente oferta cultural municipal para la creación de nuevos flujos de visitantes. Asimismo, servirá para realizar una puesta en valor de los puentes que se hallan dentro de la región. Para ello, la colección de este centro ha seleccionado una docena de los más representativos en base a cuestiones como: antigüedad, innovaciones técnicas y representatividad territorial.
Liérganes suma, así, un nuevo centro de interpretación al que ya tenía sobre el Hombre Pez desde el año 2009 en un viejo molino restaurado por la Consejería de Turismo, tras una inversión cercana a los 48.000 euros.
Por su parte, el alcalde de Liérganes, Santiago Rego, ha agradecido la disposición del Gobierno regional para llevar a cabo este proyecto y ha valorado el “salto cualitativo” que ha dado su municipio en los últimos cuatro años en lo referente a la oferta turística y las infraestructuras.
En la inauguración de este nuevo espacio también ha estado presente la directora general de Turismo, Eva Bartolomé.
Descripción de las obras
Para la ejecución de este centro ha sido necesario acometer la renovación del antiguo matadero municipal, construido en 1950, en el solar albergó en el año 816 el monasterio y ermita de San Martín. Dicho local ya fue restaurado en 2007 como Centro Joven. Entre las labores que se han acometido se encuentran la limpieza de las paredes, reparación del tejado y pintado de ventanas. Además, se remodeló un baño para proceder a su adaptación, y se ha procedido al cambio del actual suelo rústico, y de toda la instalación eléctrica.
En total se cuenta con 14 paneles con textos e ilustraciones, y 12 de ellos representan a cada puente con su historia y ubicación. A la par, se ha elaborado un vídeo sobre la misma temática. Por último, el nuevo espacio dispone de un apoyo interactivo con escenas a 360 grados de las zonas de cada infraestructura y recursos multimedia.
La lista de los seleccionados está formada por cuatro de los más antiguos puentes cántabros: El de la Maza de San Vicente de la Barquera; el Puente Viejo de Potes; el de la Fuentona de Ruente; y el Medieval de Castro Urdiales. Como representantes de la edad moderna se han incluido dos de Liérganes (el Mayor y el de Rubalcaba); el de Arce de Piélagos y el Carlos III de Reinosa. Los de la época contemporánea que tendrán un hueco en la villa son el Puente del Ferrocarril de Campoo de Enmedio; el de Golbardo de Reocín; el Puente de Hierro situado entre Bárcena de Cicero y Colindres; y el viaducto de Montabliz.
Estos son algunos de los escogidos entre los ‘más de mil puentes’ que los encargados del proyecto afirman que hay en Cantabria, con el fin de poner en valor los que tienen características especiales y separarlos de aquellos que son meramente funcionales.