La vía ferrata de Liérganes, la más cercana a la bahía de Santander, se pone en funcionamiento para potenciar el turismo activo en el Valle del Miera
El consejero, Francisco Martín y el alcalde, Santiago Rego visitan la instalación ubicada en el monte Cueto Calgar, muy cerca del casco urbano y con un grado de escasa dificultad
La vía ferrata más cercana a la bahía de Santander. , ubicada en Liérganes, se ha abierto hoy al público con la visita a la instalación del consejero de Innovación, Industria, Turismo y Comercio, Francisco Martín que ha estado acompañado del alcalde de Liérganes, Santiago Rego y del director general de Ganadería y Desarrollo Rural, Miguel Ángel Cuevas, entre otras autoridades, entre las que también se encontraba el presidente del Grupo de Acción Local Valles Pasiegos, Ángel Sainz.
La ferrata salva un desnivel de 75 metros y mide 120 metros. Está ubicada en el conocido como ‘Pico Levante’, concretamente en el escaparate de caliza del monte Cueto Calgar, en el barrio de Extremera en Liérganes. Este monte tiene una altitud de 435 metros y está bastante cerca del casco urbano de Liérganes, con lo que se facilita el desplazamiento a pie. También dispone de acceso de los vehículos por el camino rodado que va a las conocidas como las Tetas de Liérganes.
El consejero, Francisco Martín, ha destacado el atractivo turístico que esta vía supone para Liérganes y la comarca, así como el hecho de su cercanía con la bahía de Santander. “Estar a veinte minutos de Santander, tener al lado una estación de FEVE y poder darse un paseo de media hora hacia la ferrata, y desde allí contemplar un paisaje único, supone un atractivo turístico de consideración”, ha recalcado Martín. El consejero ha animado a recorrerla, siempre con el asesoramiento del Centro de Actividades Alto Miera, empresas de turismo activo de la zona o del Ayuntamiento, donde se encontrará un servicio para proporcionar el equipamiento obligatorio que incluye casco, arnés, disipador y cuerda auxiliar.
Martín ha dicho que el turismo no sólo es ver. “Se quiere ir a los sitios para experimentar y para vivir”, ha dicho Martín, añadiendo que los visitantes podrán encontrar en Liérganes muchas cosas para vivir y sentir, elogiando la oferta turística del municipio y felicitando al alcalde por la idea de la ferrata que Martín también ha puesto como ejemplo de colaboración de las diferentes administraciones, ya que los 12.500 euros de su inversión se han financiado con el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural de la Unión Europea y la participación del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente; la Consejería de Medio Rural, Pesca y Alimentación del Gobierno de Cantabria y el Grupo de Acción Local Valles Pasiegos.
El alcalde, Santiago Rego, ha recordado que la Vía Ferrata se complementa desde el punto de vista turístico con dos acciones de la Consejería de Turismo como son el Plan de Movilidad Turística de Liérganes, con un aparcamiento y una marquesina de recepción de visitantes que supondrá una inversión de 59.000 euros y el proyecto de unir los balnearios de Liérganes y Solares por medio de una senda fluvial del Miera con zonas y elementos de recreo.
Características de la instalación
La vía ferrata está instalada en una piedra de alta calidad, lo que significa un mínimo riesgo de desprendimientos, el impacto visual es prácticamente nulo y no afecta a la privacidad de espacios particulares. Las características de esta vía permiten un recorrido con un nivel de dificultad muy asequible, de grado fácil, adecuado para ser utilizado en las escuelas de montaña para el aprendizaje de técnicas a deportistas federados y también para practicantes de turismo activo. Contemplando ambos colectivos, la vía tiene todos los requisitos de accesibilidad y seguridad para un público poco formado, incluido niños, con proximidad de grapas, fraccionamientos de línea de vida, pasarelas en puentes, reuniones de escape y de rápel en cada tramo comprometido.
La variedad de la instalación hace posible diversas posibilidades de ataque, lo que refuerza su carácter de escuela. En su tramo final y más vertical se produce la parte más vertiginosa de la ferrata. Valorando el terreno escarpado y abrupto, se ha colocado una línea de vida en el retorno de la ferrata para salvar diferentes zonas con riesgo de caída para llegar a la senda de una manera más segura.
El factor de la seguridad
Todos los elementos que componen la ferrata son de acero galvanizado empotrados en la pared mediante anclajes químicos. La cadena de seguridad principal se basa en los anclajes (tensores pix fixe), la resina química (index epoxycrilato) y el cable de seguridad para la línea de vida de 12 milímetros de acero galvanizado, con la consiguiente certificación y homologación europea. Para la colocación de los anclajes se ha procedido a sanear la pared. Los peldaños de acero galvanizado corrugado de 16 milímetros guardan una parte muy importante para la progresión.
El proyecto de la ferrata tiene contemplado una ampliación en la parte baja de iniciación, una zona para habilitar aparcamientos y también la creación de una página web.