El Gobierno regional inicia el procedimiento para declarar Bien de Interés Local, con la categoría de monumento, a la planta de concentración de mineral de hierro de Obregón
Pablo Zuloaga y Javier López Marcano han asistido al acto conmemorativo del 50 aniversario de esta instalación y han destacado su papel en la historia reciente de Cantabria
El Gobierno regional ha iniciado el procedimiento para declarar Bien de Interés Local, con la categoría de monumento, a la planta de concentración de mineral de hierro de Obregón, en Villaescusa, localizada dentro del Parque de la Naturaleza de Cabárceno.
Así lo ha dado a conocer esta mañana el vicepresidente y consejero de Universidades, Igualdad, Cultura y Deporte, Pablo Zuloaga, durante la visita a esta instalación con motivo del acto de conmemoración de su 50 aniversario, en el que ha estado acompañado por el consejero de Industria, Turismo, Innovación, Transporte y Comercio, Javier López Marcano.
Con esta declaración, Zuloaga ha asegurado que se pasa de las palabras a los hechos, haciendo realidad una iniciativa promovida por la Asociación para la Defensa del Patrimonio Cultural del Valle de Villaescusa.
En este sentido, ha señalado que la planta forma parte de la historia reciente de Cantabria, con un pasado industrial y económico y con un presente cultural y turístico.
También se ha referido al carácter histórico de esta instalación como testigo de una actividad industrial fruto de una visión innovadora del negocio de la minería, que modernizó el sistema de lavado del mineral y que condicionó la forma de vida y el desarrollo del municipio de Villaescusa y sus vecinos.
Por su parte, López Marcano ha vinculado los principales referentes turísticos de Cantabria, como el Parque de la Naturaleza de Cabárceno, El Soplao o Fuente Dé, con un pasado como espacios mineros. En este sentido, ha señalado que estas instalaciones reflejan una forma de vida y que se debe trabajar por recuperar la herencia dejada por generaciones anteriores a través de respetuoso tratamiento y gestión del patrimonio heredado.
Junto al vicepresidente y al consejero de Industria, al acto ha asistido el alcalde de Villaescusa, Constantino Fernández; la directora general de Patrimonio Cultural y Memoria Histórica, Zoraida Hijosa; el director general de Transporte y Comunicaciones, Felipe Piña; los alcaldes del entorno de la sierra de Peña Cabarga y varios mineros que ejercieron su actividad profesional en la planta.
Constantino Fernández ha puesto en valor la importancia, trayectoria y significado económico para el municipio. También ha agradecido el esfuerzo de la Dirección General de Patrimonio Cultural y Memoria Histórica para recuperar el patrimonio industrial de Cantabria.
El acto ha incluido el descubrimiento de una placa conmemorativa del 50 aniversario de la planta. Además, se ha hecho sonar la sirena de la mina, el primer elemento que se ha restaurado de la planta y un sonido interiorizado en la memoria histórica de los vecinos de Villaescusa.
Composición de la planta
Tal y como se recoge en la resolución de la Dirección General de Patrimonio Cultural y Memoria Histórica, que se publicará la próxima semana en el Boletín Oficial de Cantabria, la planta ocupa una superficie de unas 3 hectáreas y sus distintas edificaciones se distribuyen en tres zonas: de descarga de mineral en la parte alta, de desbaste primario en la parte media y de relavado y medios densos en la parte baja.
Dentro de las partes integrantes, pertenencias, accesorios y bienes muebles vinculados a la planta, y que también tendrán la consideración de Bien Interés Local, se incluyen la cuchara del scraper, el trómel primario, el preparador primario, la batería de ciclones, el trómel de relavado y el tambor separador con el vibrotamiz.
El lavadero de Obregón, uno de los pocos conjuntos para el tratamiento del mineral de hierro que se mantienen en la actualidad, se une con los antiguos lavaderos de Solía a través del trazado original del tren minero, siendo hoy en día una senda peatonal.
Estas instalaciones se unen también con el embarcadero de la Orconera de El Astillero mediante otro tramo del ferrocarril minero, hoy reconvertido en senda peatonal, constituyendo en su conjunto un paisaje único para la interpretación de la minería del hierro en la Bahía de Santander.